viernes, 12 de noviembre de 2010

FÁBULA: EL POLLO PERDIDO.


Un buen día un hombre le preguntó a un vendedor de El corte Inglés.
-Me puede decir,si es usted tan amable,¿dónde se encuentra la sección de deportes?
Y el vendedor, que era mayor y estaba un poco mal de la cabeza,le contestó de una manera muy peculiar,que fue esta:
-Joven hombre, si queréis saber dónde se encuentra tal sección dejadme que os cuente un apólogo sobre un pequeño pollito que se perdió un día de fiesta,en el día nacional de todas las aves.Esta fábula dice así:
En el día nacional de las aves, que se celebra el 8 de Mayo,todas las aves del ecosistema de bosque mediterráneo se reúnen en la plaza de las Aves.
Una familia de gallinas que no se quería perder una fiesta de tan gran tamaño , así que , fue a  la plaza con sus cinco pollitos,Po,Pi,Pu,Pe y Pa .
En la plaza había un gran espectáculo y todos fueron a verlo,pero Po,que era muy glotón,se quedo admirando cómo hacían unos gusanos calientes y su familia se fue sin enterarse de que se quedaba ahí.
Un rato después oscureció y Po se dio cuenta de que estaba solo .Muy asustado salió corriendo y llorando.Cuando consiguió calmarse.Intentó preguntar a las aves que allí quedaban,pero todas eran jóvenes y estaban haciendo botellón.Muy desconsolado por no haber podido sacar información vagó solo y triste por la gran plaza en la que ya solo había basura y borrachos.
De repente vio una sombra que le empezó a perseguir.Po salió corriendo sin mirar atrás,pero,sin darse cuenta tropezó con un palo y cayó al suelo cuando su perseguidor estaba ya cerca ,cerró los ojos y cuando los abrió vio que esa maligna figura era su padre,y Po sonrió aliviado.
-Bueno ¿qué te ha parecido?-dijo el vendedor.
Y el hombre respondió
-Me ha gustado mucho,Usted lo que quiere decir es que busque ,que al final lo acabaré encontrando.
Un hombre a su lado que estaba escuchando dijo:
-Busca,busca,busca sin parar
que al final tu meta vas a encontrar.

El noble Fernández


Hoy os voy a contar cómo se creó el mosaico que hay en la pared izquierda de la capilla de nuestro pueblo.
Corría el siglo XII y un joven bien apuesto soñaba con llegar a ser noble.
-Pero eso es imposible.tú has nacido esclavo y morirás esclavo-le decía siempre su padre.
Pero Fernández,el hijo de Fernando,que así se llamaba el joven,no pensaba dejar de perseguir su sueño.
Un día a Fernández le llegó el rumor de que había un sacerdote en el feudo que vendía antepasados para que la gente esclava como Fernández pudiera conseguir llegar a ser un señor feudal.
Al día siguiente por la noche,Fernández fue a la iglesia del feudo a hablar con el Padre Manuel, que era el que vendía los antepasados.Al llegar a la iglesia,se lo encontró muy nervioso dando vueltas de un lado para otro.Fernández dijo con una voz muy tímida:
-Padre Manuel;
-¿Qué quieres?,Fernández,tengo prisa.
-Me he enterado que usted vende antepasados para poder llegar a ser noble.¿Es eso cierto?
-Sí lo es¿Por qué lo decís,hijo?
-Porque quisiera comprarme unos,Padre.
-Si los quieres tendrás que pagarme dos bolsas ded oro.
-¡Pero yo,no dispongo de tanto dinero!
-Mmm en ese caso podríamos llegar a otro acuerdo.
-¿Cuál?
-Si me llevas al reino de Aragón en hombros te daré tus antepasados.
-Esta bien.Acepto.
Y así,atravesando bosques y montañas,ríos y lagos Fernández consiguió llevar al Padre Manuel en hombros desde el reino de Castilla hasta el reino de Aragón y consiguió así sus títulos de nobleza.
A las dos semanas, cuando fue el nombramiento de Fernández como señor feudal hizo que pintaran un mosaico en el que salía él llevando en hombros al Padre Manuel.